
Rompe las estructuras de poder que se nombran salvadoras pay@s de los Gitanos. No queremos transformar sino construir nuevas estructuras gitanas, desde la experiencia, vivencia, formación, coherencia y responsabilidad de expertas gitan@s en educación, empleo, vivienda, salud y justicia.
Un plan sobre Antirracismo tiene que tener en cuenta a las comunidades que sufren racismo y antigitanismo. Ahora, las instituciones europeas dicen que quieren modificar su política de contratación para incluir la diversidad racial, pero antes que plantear planes de inclusión hay que revisar el panorama institucional y de representación actual.
¿Quiénes están hablando por los gitanos en estos momentos y por qué? ¿Con quiénes se contará para la formulación y ejecución de esos planes? ¿Con las mismas organizaciones payas que vienen gestionando las subvenciones europeas hasta la actualidad? ¿Va a servir este nuevo plan para que estas organizaciones lideradas por hombres payos se sitúen como portavoces y sigan engordando sus estructuras payas y antigitanas?
Contestar a estas preguntas es fácil si investigáis un poco. Todo el mundo conoce esas portavocías y las estrategias de las organizaciones payas que usurpan nuestras voces gitan@s. Son organizaciones que maquillan su antigitanismo colocando algunos gitan@s en sus estructuras, y siempre en posiciones subordinadas a los intereses y perspectivas de los payos que mandan. Además, los “gitanos colonizados o coaccionados” que invalidan las críticas y las luchas de los gitan@s antirracistas y feministas son participes del maquillaje de estas grandes ongs para fingir que se cambia algo sin cambiar nada. Somos conscientes que ninguna de esas caras plantea realmente una Política Gitana, más que nada porque se les prohíbe lo que se nos prohibía en aquellas primeras pragmáticas antigitanas: pensar y actuar como gitan@s. No los culpamos a ell@s si no a sus opresores, que son validados por la Unión Europea.
Hasta ahora, hemos visto que las buenas intenciones de la Unión Europea solo han servido para desarrollar planes para los gitanos sin los gitanos. Estos planes no han sido efectivos ni han supuesto un cambio para el Pueblo Gitano. Y es que no se puede intentar cambiar una realidad sin las personas que la padecen en primera persona. No se puede luchar contra el racismo y el Antigitanismo sin las personas gitanas, y, sobretodo, sin contar con nuestra perspectiva y conocimientos. No se puede pretender hacer política antirracista con las mismas estructuras y actores antigitanos, a nuestra subordinación y negación como actores y actrices políticas.
Así que seguimos preguntando, aunque sepamos las respuestas: ¿dónde están los gitan@s como diseñadores, evaluadores de dichos planes? ¿Dónde están las romaníes supervivientes al racismo estructural antigitano de siglos en Europa en las grandes comisiones institucionales europeas? ¿Qué papel real, más allá de el de simples monigotes, tienen los gitan@s en una estructura payas como Fundaciones o partidos políticos que operan con la extrema derecha? ¿Qué política se puede hacer desde una estructura paya? ¿Política antigitana?
El Pueblo Gitano como sujeto político exige una agenda política gitana, para ello #Corta con el Antigitanismo del paternalismo y las operaciones de colorear las estructuras y la política antigitana.